NAUFRAGIO DEL VAPOR "CAZADOR", CONSTITUCION, 30 DE ENERO DE 1856





El naufragio del vapor "Cazador", ocurrió el 30 de enero de 1856, en Punta Carranza, en las cercanías de Constitución (Punta Loanco y Caleta Loanco dice en www.alertaaustral.cl).

El vapor "Cazador", era una nave de la Armada de Chile, que cumplía funciones de carga, fue construido en 1848 en Francia y adquirido por el gobierno chileno antes de la Revolución de 1851. Tenía 250 toneladas y una velocidad de 9 nudos. Estaba al mando del Capitán Ramón Cavieses y contaba con una tripulación de 65 marineros.

El día 26 de enero de 1856, el vapor llegó a Talcahuano con la misión de trasladar a la Sexta Compañía del Segundo de Línea (actual Regimiento Maipo de Valparaíso) y sus familias a la nueva plaza en Valparaíso que se les había asignado. Esta compañía había estado los últimos 5 años en una zona al sur de Concepción pacificando a los últimos reductos del General José María de la Cruz que se dedicaban al pillaje y al bandolerismo.

El vapor zarpó de Talcahuano con rumbo a Valparaíso a las 11:30 am, llevando consigo no sólo a los militares y sus familias, sino también pertrechos militares, cañones y caballos. Así mismo el barco llevaba como pasajeros a algunos funcionarios públicos y sus familias. En total se estima que trasladaba 501 personas (450 personas dice en www.wikipedia.com; 460 personas en “Historia de la Marina de Chile”, Carlos López Urrutia, 2007; y 458 muertos y 41 sobrevivientes en www.alertaaustral.cl).

De acuerdo a la bitácora la salida del vapor se verificó con viento sur y mar llana, a la una de la tarde y a 15 millas de puerto, la máquina se puso a media fuerza y con ayuda de las velas llegó a las 9 millas por hora, desde es ahora en adelante viajó a 6 millas de la costa, hasta las 20 horas, en que encalla en los roqueríos de Punta Carranza, 18 millas al sur de Constitución.


Luego del encallamiento, el capitán Cavieses, ordenó poner marcha atrás el barco, con esta maniobra el casco del vapor se partió en sentido longitudinal, anegando rápidamente sus compartimentos. Sólo lograron bajar 4 botes salvavidas, dos de los cuales se estrellaron en los roqueríos cercanos, muriendo sus ocupantes. Los otros dos botes se alejaron del naufragio a mar abierto, llegando tan sólo al medio día del día siguiente a tierra. 

Los sobrevivientes que llegaron a la costa en estos botes fueron 23, entre ellos el capitán Cavieses y parte de su tripulación, tan sólo sobrevieron 2 militares.

Los días posteriores al naufragio, el mar arrojó sobre la costa de Constitución los cadáveres de los viajeros, en grupos de 12 a 15 personas aparecían cadáveres de mujeres sosteniendo a sus hijos y de gente abrazada entre sí.

El parte oficial hecho por Cavieses deja constancia que murieron ahogados: 166 mujeres, 86 soldados del segundo de línea, 4 oficiales de del segundo de línea, 42 tripulantes y 9 pasajeros, totalizando 307 personas omitiendo el número de niños y polizones que superaban los 150.

La opinión pública de ese entonces condenó la labor jugada por el capitán y se le siguió un Consejo de Guerra en Valparaíso. El Consejo de Guerra absolvió a Cavieses y se le reincorporó a la Marina de Chile, pero fue redestinado a realizar levantamientos hidrógráficos en las difíciles aguas al sur de las Islas Guaitecas.


Dice en “Historia de la Marina de Chile”, Carlos López Urrutia, 2007:



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Memorias del naufragio en Punta Carranza

Dr. Carlos Méndez Notari

Este próximo 30 de enero, el Ejército y la Armada seguramente harán un merecido recuerdo de las victimas del naufragio de Punta Carranza acaecido en 1856. En efecto hace ya 158 años el Vapor Cazador de la Armada chilena, que se encontraba navegando entre Talcahuano y Valparaíso, se hundió con más de medio millar de personas procedentes del Regimiento 2º de Línea, marineros de dotación del vapor, mujeres y niños, además de algunos civiles que cumplían funciones públicas en la zona, tal como consta en el manifiesto de embarque elaborado para el zarpe, lo que se constituyó en el naufragio con más muertes en la historia de la navegación en toda America Latina.

La embarcación había dejado Talcahuano a las 11.30 horas sin ningún contratiempo ni dificultad, la navegación era normal, con algo de viento, pero en general se avizoraba un buen viaje. Sin embargo a eso de las 20 horas estando de guardia el teniente 1º Roberto Simpson, se produjo un violento choque contra un roquerío que no había sido avistado por el citado oficial a cargo, produciéndose el encallamiento en un punto conocido como Punta Carranza, a unos 36 kilómetros al sur oeste de Constitución. En consecuencia bastaron solo unos cuantos minutos para que se rompiera horizontalmente la proa, ante la magnitud del impacto, el comandante del buque capitán Ramón Cabieses, ordena ejecutar reversa a toda máquina y en ese momento se produce la segunda gran rotura en la popa y se empieza a hundir, activando el plan de evacuación, sin embargo pese a ello, la tragedia fue total.

Según el manifiesto del embarque y los informes entregados por las autoridades, establecieron que de las 501 personas embarcadas oficialmente esa mañana, solo salvaron con vida una mujer y 42 marineros, pudiendo inferir, que el accidente, costó la vida de 458 personas.

El parte oficial elaborado por el capitán Cabieses y dirigido al Comandante General de Marina, fechado el 4 de febrero del mismo año, detallaba que el número de muertos correspondía a 86 soldados del 2º de Línea que se encontraban prestando servicios en la Araucanía, bajo el mando del general José María de la Cruz, 42 marineros de la tripulación del vapor Cazador, 9 pasajeros civiles, 166 mujeres en su mayoría esposas de los militares del mencionado Regimiento, además de un número indeterminado de niños y unos cuantos polizones, que según estimaciones del capitán Cabieses, sumarian unos 150.

La opinión pública de la época, condenó duramente el actuar del comandante del buque, a lo cual las autoridades dispusieron un Consejo de Guerra en Valparaíso; sin embargo el dictamen del citado Consejo, absolvió de toda responsabilidad a Cabieses, por lo cual se le reintegró a la Institución, para cumplir funciones en el Servicio Hidrográfico. Más tarde, es nombrado gobernador marítimo en Valparaíso, Iquique y Talca, también prestó servicios en el Estado Mayor y comandante de algunas unidades de la Escuadra e incluso, tuvo una destacada participación como miembro de la Junta de Coordinación de la Armada, en contra del Presidente José Manuel Balmaceda durante la Revolución de 1891.

En síntesis, podemos señalar que este naufragio que recordaremos a fines del presente mes de enero, ha sido el accidente que ha causado la mayor cantidad de muertos tanto del Ejército como de la Armada en tiempos de paz y que además lo ubica como el accidente de mayor connotación, en toda America Latina, en toda su historia de navegación.

Por último la lectura de este breve articulo, nos permitiría cambiar la idea que persiste en los chilenos, al sostener que la “Tragedia de Antuco”, es la que ha costado más vidas de soldados en tiempos de paz.

ACADEMIA NACIONAL DE ESTUDIOS POLITICOS Y ESTRATEGICOS, MINISTERIO DE DEFENSA NACIONAL
www.anepe.cl/2014/01/memorias-del-naufragio-en-punta-carranza