NAUFRAGIO DEL VAPOR "CAUTIN", RIO IMPERIAL, NEHUENTUE - PTO. SAAVEDRA, 
19 DE ENERO DE 1948


VERANO DEL 48: EL HUNDIMIENTO DEL VAPOR CAUTÍN

"Pasado de meridiano como a las siete y media partió el cargamento humano con rumbo a la tragedia".
Era la tarde del 19 de enero del año 1948, en vísperas de la fiesta religiosa de San Sebastián, cuando cientos de peregrinos (se dicen 300 o unas 500 personas) se embarcaron en el Vapor Cautín para asistir a la celebración de dicha festividad, en la localidad de Nehuentúe. Este barco era impulsado por una rueda de paletas dispuesta en la popa, que giraba mediante un sistema de bielas movidas por una máquina con caldera. La navegación por el caudaloso río Imperial, desde el puerto fluvial de Carahue, no había sido tranquila, pues algunos pasajeros se habían quejado del sobrepeso impuesto a la embarcación y viajaban inquietos. A poco de llegar a destino el barco ya hacía agua, agravándose la situación por súbita detención de la máquina a vapor, debido a lo cual el capitán maniobra para llevarlo hacia la orilla, produciéndose el volcamiento por el empuje de la corriente del río.
Don Osiel Baier López (76 años de edad) fue en aquel entonces un infantil testigo del trágico acontecimiento y narra qué es lo que pudo observar en esa triste noche (relato aparecido en un artículo del periódico digital clave9.cl).
 "En esa época tenía 10 años de edad, viajaba con mi padre, madre y un hermano de cuatro años. Lamentablemente  mi padre y hermano no lograron  salvarse, el vapor fluvial Cautín salió con 60 centímetros bajo la línea de flotación, por la carga y el sobrepeso que llevaba, iban a bordo unas 300 personas más o menos, nosotros veníamos en la parte superior del puente de mando, escuchaban todas la conversaciones de la tripulación donde comentaban que en cuatro ocasiones  que el barco estaba haciendo agua, de pronto las calderas se apagaron y en toda la curva llamada “Vende Patos”, antes de llegar a Nehuentúe las máquinas se detuvieron, el capitán Humberto Faúndez  Cáceres hizo un viraje para encallar a la orilla pero la inercia y la corriente lo dejó atravesado y se tumbó hacia el rio, la noche estaba muy oscura la gente se tiró hacia el río y no hacia la orilla. Yo me salvé porque me aferré a una carreta que iba flotando por el río y luego me tomé de una señora de aproximadamente 80 años que  me llevó hacia la horilla, donde me encontré con  mi madre, afortunadamente viva. Mi padre falleció y el cuerpo de mi hermano lo encontraron ocho días después”.
A poco de ocurrido este hecho la Imprenta y Encuadernación "Abecé" de Temuco, imprimíó y vendió, por el valor de dos pesos ($2) de aquella época, un informativo en el que, de una manera tristemente poética, alude a este trágico suceso y publica una nómuina de los fallecidos.
" ... Después llegan a Tranapuente para dirigirse a Nehuentúe pero el barco con su gente se hunde frente al fundo de los señores Larrulet. Por enfilar la proa el barco en la ribera los barre como escoba y sálvese quien pueda.... Aquí metió su cola el espíritu de Lucifer borrachos en aquellas horas iban de Capitán a Timonel. Los sobrevivientes dijeron son ellos los responsables que no se sacian de beber y cometen crímenes detestables".
La lista de las víctimas aparece íntegramente en el post "Las víctimas del naufragio del Vapor Cautín", en el Blog "Historia Familiar en el sur de Chile".

(“Araucanía Patrimonial”, 13 de febrero de 2014, http://araucaniapatrimonial.blogspot.co.at/
2014/02/verano-del-48-el-hundimiento-del-vapor.html omar acuña)


LAS VÍCTIMAS DEL NAUFRAGIO DEL VAPOR "CAUTÍN" (19 DE ENERO DE 1948)

A sesenta y seis años de aquella desgracia, ya casi nadie conoce los nombres de quienes fueron las víctimas de aquel hecho, salvo algunos familiares y descendientes directos de aquellos desafortunados y devotos pasajeros, por lo que he sentido necesario el traerlos hasta presente, para que no se les olvide para siempre, esperando que a más de alguien pueda serle útil en el futuro esta noticia. La lista la transcribo de una publicación contemporánea del suceso, hecha por la Imprenta "Abecé" de Temuco, copia que me fue proporcionada por don Jorge Echeverría Schalchli, descendiente de una familia que para ese entonces tenía su domicilio en la localidad de Carahue (ver ""Carahue y Nueva Imperial: el negocio de la producción, compra y venta de maderas nativas. Recordando a dos de su comerciantes").
La tragedia del volcamiento y hundimiento del Vapor "Cautín", un transporte de carga y de pasajeros que realizaba la ruta Carahue a Puerto Saavedra, y viceversa (ver "Verano del 48: El hundimiento del Vapor Cautín") acarreó consigo el inesperado fallecimiento de hijos (algunos de corta edad), padres y madres, no así la de la tripulación que, según se informó, viajaba bajo los efectos del alcohol. Los centenares de viajeros fluviales que se embarcaron en la nave viajaban a la festividad religiosa de San Sebastián, a realizarse en la localidad de Nehuentúe. La religiosidad de la gente mandaba asistir a aquella peregrinación, por lo que nadie esperaba que aconteciera la desgracia  frente a la curva "Vende Patos", poco antes de arribar al puerto fluvial en el que se realizaría la festividad.

(“Ancestros Chilenos”, 16 de febrero de 2014, http://ancestroschilenos.blogspot.co.at
/2014/02/las-victimas-del-naufragio-del-vapor.html omar acuña)













(Jorge A. Olave Riveros, Galería Histórica de Carahue, www.pinterest.com)