ERUPCION VOLCANICA EN ISLA DECEPCION, ANTARTIDA CHILENA,
DESTRUCCION DE LA BASE "PEDRO AGUIRRE CERDA", 4 DE DICIEMBRE DE 1967














BASE PRESIDENTE PEDRO AGUIRRE CERDA, UNA HISTORIA QUE NO SE OLVIDA 

www.radiopolar.com, 18-02-2014

Para algunos podría haber sonado profético el nombre de la isla donde se instaló esta base; sin embargo Isla Decepción a juicio de conocedores debe ser una de las más increíbles del planeta dado que se trata de un volcán activo en las islas Shetland del Sur, frente a la Península Antártica.

Su extraordinario paisaje lo constituyen áridas laderas volcánicas, playas con fumarolas y glaciares cubiertos por cenizas. La isla presenta una curiosa forma de herradura, para otros la forma de una encantadora sonrisa con una amplia caldera inundada. Se abre al mar a través de un estrecho canal con piedras a ambos lados, los "Fuelles de Neptuno", formando un puerto bajo refugio natural. Es uno de los pocos lugares en el mundo donde los buques pueden navegar directamente en el centro de un volcán en actividad.

Este entorno, diferente y llamativo lo hacía especial para la instalación de una base, que dentro de sus mayores fortalezas tendría la de entregar apoyo a científicos e investigadores que veían en el lugar un enorme potencial.

Es así que el 18 de febrero de 1955, se inaugura la Base Antártica Presidente Pedro Aguirre Cerda por el ministro de defensa Tobías Barros Ortiz, durante la comisión del Comodoro Jorge Gándara B. que estuvo a cargo de la Fuerza Aérea de Chile. Se le había designado a la base primeramente el nombre del entonces presidente, Carlos Ibáñez del Campo, pero él dispuso el nombre del ex mandatario Aguirre Cerda, en gratitud a su disposición del decreto supremo que delimitó el Territorio Chileno Antártico en 1940.

En ella se efectuaron investigaciones de vulcanología, climatología y meteorología. Desde 1965 funcionó una oficina de previsión del tiempo, para mantener la seguridad meteorológica a nivel nacional e internacional, pero fue un 4 de diciembre de 1967 cuando de forma abrupta e inesperada, la Isla más maravillosa del mundo se vuelve un infierno y no son muchos los afortunados que pueden decir que se salvaron de una erupción volcánica para contar la historia.

Los relatos más sencillos se convierten en espectaculares cuando un suceso de normalidad sale de su eje. Eso ocurrió el 4 de diciembre.
Era el día elegido para hacer el relevo de la dotación que llevaba un año en la base, la mañana fue normal con las revisiones de último momento a fin de hacer entrega de las instalaciones en óptimas condiciones a quienes llegaban, quizás también a vivir una de las mejores experiencias de su vida. Durante toda la mañana se sintieron fuertes temblores que no hacían auspiciar la trágica erupción.

La ceremonia de cambio de mando se efectuó con absoluta normalidad y mientras se celebraba el cambio, los helicópteros llevaban la carga al Piloto Pardo de la Armada que trasladaría a la gente que dejaba el lugar.

No pasó mucho desde que zarpo el buque cuando un oficial exclama ¡Erupción volcánica en Isla decepción! “el volcán ha reventado y en breves minutos afectará con toda su violencia a la base Presidente Pedro Aguirre Cerda” Todo se cubrió y los uniformados de la base, la dotación recién llegada, avanzó en una columna por los senderos nevados hacia la Base Inglesa cercana al lugar.

Nadie murió, las 42 personas de la dotación fueron rescatadas mediante arriesgadas maniobras de los helicópteros del Buque Piloto Pardo y la dotación de buenos camaradas marchó cantando el himno de la FACh. Era una descarga emocional, contaron más tarde los sobrevivientes.

Esta base dio, tras su desaparición, inició a otras que se alzaron como nuevas promesas en el continente blanco. Entre ellas la Base Presidente Frei y junto a ella Villa Las Estrellas. En ocasiones una tragedia se vuelve una oportunidad, y así lo asume la Fuerza Aérea.

Finalmente lejos de ser una decepción, esta isla mostró la mística y el coraje de los aviadores que dejó una base bajo cenizas, pero jamás en el olvido.


LAS OPERACIONES DE LA ARMADA DE CHILE

LAS PRIMERAS OPERACIONES AEREAS DE RESCATE EN HELICOPTERO

Estas aeronaves efectuaron el primer rescate en Sudamérica con helicópteros, ante fuertes lluvias ocurridas en la zona central del país en 1953, y posteriormente durante los temporales de 1957, 1958, 1960, 1961 y 1965; y durante las operaciones luego del terremoto - maremoto de 1960 en Valdivia. (*8)

En 1967 y 1969 los helicópteros navales embarcados a bordo del buque "Piloto Pardo" realizan su más dura, pero efectiva tarea de rescate, durante la erupción volcánica en Isla Decepción, en la Antártida Chilena, donde fue destruida la Base Antártica de la Fuerza Aérea "Presidente Pedro Aguirre Cerda", y fueron evacuados personal chileno y extranjero, acción aeronaval que fue elogiada en los medios de prensa internacional.


LA ERUPCIÓN VOLCÁNICA DEL 4 DE DICIEMBRE DE 1967 EN ISLA DECEPCIÓN, ANTÁRTICA CHILENA

Helicópteros aeronavales embarcados en el buque "Piloto Pardo", efectúan el rescate de más de 30 personas de la Base Antártica "Pedro Aguirre Cerda" debido a la erupción volcánica en Isla Decepción. Días antes hubieron varios sismos y cerca de las 19 horas del 4 de diciembre de 1967, una explosión y columna de humo alertó a la dotación antártica y a un grupo de  extranjeros. La evacuación efectuada por los helicópteros Bell se hizo difícilmente bajo una lluevia de granizos y ceniza. (*9 y 10)

A las 3 horas de la madrugada se dió orden de salvamento vía aérea, ya que por mar la marea era violenta. Viento de 30 nudos, una atmósfera enrarecida dificultaba la radiotelegrafía, escasa visibilidad y ventisca de nieve junto a la ceniza volcánica. Sin embargo, sólo a las 7:17 horas del 5 de diciembre, los helicópteros piloteados por los tenientes Fedrick Corthorn Besse y Héctor Higueras Ormazábal, despegaron del buque e iniciaron el rescate. A esa hora aún la visibilidad era mínima debido a la nube volcánica. 26 chilenos y 15 ingleses, y Gracias a la Divina Providencia, fueron rescatados con vida. (*9 y 10)

"Los helicopteristas realizaron una doce de vuelos en medio de una lluvia de piedras volcánicas. Por esta proeza, el Reino Unido les concedió la "Medalla al Valor", otorgada en reconocimiento de Su Majestad la reina de Inglaterra (*11)".

"En la extraordinaria actividad desplegada por los buques del Grupo de Tarea Antártico para este difícil rescate, se destacó nítidamente la acción valerosa y de gran mérito profesional de las dotaciones de los helicópteros. Su tenacidad, pericia y valor, que terminó con el rescate de los 42 hombres..., fue comentado elogiosamente por la opinión pública..." (*3)

LA ERUPCIÓN VOLCÁNICA DEL 22 DE FEBRERO DE 1969 EN ISLA DECEPCIÓN, ANTÁRTICA CHILENA (*10)

Tras la erupción de 1967, un grupo de científicos ingleses regreso a un refugio en Isla Decepción, sin saber que deberían nuevamente pasar por terroríficos momentos.

El 22 de diciembre de 1969 la isla volvió a eruptar humo, cenizas y gases tóxicos. Un avalancha de hielo y barro producto del calor arrasó con los restos de la antigua Base "Aguirre Cerda", la antigua ballenera y el cementerio noruego. A las 17 horas, bajo casi obscuridad total, los helicópteros piloteados por los tenientes Víctor Parada Kreft y Hugo Bruna Green intentaron cuatro veces el rescate. La valentía de los pilotos chilenos pese a lo peligroso del vuelo, llevó a rescatar a los británicos al divisar una fogata en tierra cuando se habían refugiado en unas cuevas, en momentos que ya era de noche y bajo una lluvia de piedras volcánicas.

También fue una pericia aterrizar en la cubierta del "Piloto Pardo", ya que una capa de oscura y viscosa nieve cubría la burbúja de la cabina, por lo que los pilotos debieron sacar la cabeza por la ventanilla para maniobrar.

Entre los rescatados había un ex piloto de la Real Fuerza Aérea inglesa (RAF) que agradecía diciendo: "En las condiciones que se dieron no era posible volar. Consideró casi irreal lo hecho por los chilenos".

El comandante del buque inglés HMS "Shackleton" que llegó a socorrer a sus connacionales, calificó el rescate como "una increíble habilidad marinera", remitiendo en el informe a la Armada Real inglesa, y retransmitido por la prensa británica: "Los esfuerzos de rescate hechos por los chilenos, fueron un soberbio ejemplo de destreza marinera, sobre todo si se considera que los vuelos fueron llevados a cabo bajo espantosas condiciones".

Ante los acontecimientos del rescate en Isla Decepción, los tenientes Corthorn, Huigueras, Parada y Bruna, fueron posteriormente merecedores de la "Medalla al Valor" por parte de la Armada de Chile y de la Marina Real inglesa.



OTRAS OPERACIONES AERONAVALES DE RESCATE ANTARTICO CON LOS HELICOPTEROS BELL

- 3 de febrero de 1971, helicópteros Bell 47G y 47J del "Piloto Pardo", piloteados por el capitán Sergio Vergara Vergara y teniente Ariel Rosas Mascaró, rescatan a tres científicos de la Base "Vice Comodoro Marambio" de Argentina, que a bordo de una embarcación fueron arrastrados por el viento y corriente en el Mar de Weddell. (*10) Los pilotos fueron el capitán Sergio Vergara Vergara y el teniente Ariel Rosas Mascaró. (*3)

- 11 de febrero de 1972, operaciones de rescate durante malas condiciones climáticas efectúa el "Piloto Pardo" y sus helicópteros durante el varamiento del buque turístico noruego "Lindbland Explorer" en Isla Rey Jorge. Los pilotos fueron los tenientes Carlos Matamala Simmonds y Jorge Correa Tapia. (*3)

- Verano de 1973, los helicópteros del "Piloto Pardo" efectúan diversas misiones de apoyo y rescate en la Antártida durante las investigaciones del buque científico francés "Calypso", del capitán Jacques-Ives Cousteau. La nave sería luego guiada por el buque "Yelcho" al cruzar el Paso Drake y llegar a Pto. Williams. (*10) Los pilotos aeronavales fueron los tenientes Fernando Sarabia Neumann y Víctor Tapia Cerezo. (*3)

CREACION DE LA PATRULLA ANTARTICA NAVAL

Ante los diversos accidentes ocurridos en la Antártida Chilena, la Armada de Chile crea el 25 de septiembre de 1992, la Patrulla Antártica Naval (PAN). (*10)


("Base Aeronaval "El Belloto", 1953 - 1993, Quilpué", Walter Foral Liebsch, 2016)